Una fría mañana de diciembre de 1984; Griselda; argentina exiliada en Francia; se despierta con un fuerte dolor de cabeza. Tras pedir auxilio infructuosamente a Claudio; su marido; vuelve a casa; llena la bañera y ahoga en ella a sus dos hijos menores. La mayor; Flavia; de apenas seis años; se salva por hallarse en la escuela. Treinta años después; Laura Alcoba entrevista a los supervivientes de esta tragedia y; sin despejar el misterio del acto de Griselda; intenta acercarse a lo inconcebible. Preguntada sobre su madre; Flavia; que ahora es una exitosa fotógrafa; la describe como 'presente; amorosa. Muy amorosa'. Tras la Trilogía de la casa de los conejos; Laura Alcoba nos brinda una narración deslumbrante y perturbadora sobre la oscuridad que se esconde en las relaciones más cotidianas y la posibilidad de apostar por el amor y el perdón.